Oscuro en el Dolor

Te encontré dentro de la noche, dentro de la espesa niebla, mirándome y coqueteando con esos bellos colores que adornan tu piel. Un imán se cruzaba entre nosotras para tocarte, para sentirte y olerte, como en aquellas noches que me acompañabas en mi soledad y le dabas un respiro a mi corazón. Ahora te encontré de nuevo evocando en mí los sueños más dulces, bondadosos y a la vez, más oscuros y violentos, me acerco cada vez más a tu piel, mis dedos se laceran, sangran de excitación, sangran mis latidos… Van más rápido que mi respiración, mientras mi lengua se tambalea junto a tus pechos hinchados de deseo. Tus pensamientos se vislumbraban en mi mirada, tu hedor recorre mi cuerpo y mi alma, revelas mis malvadas intenciones de agarrarte y someterte a mi antojo.

Bailábamos juntas en este juego que no queremos terminar, que desdobla nuestras almas, mientras te toco con mis movimientos arrítmicos y froto mi pelvis junto a ti deseándote ¡Es tan placentero! Que mi dolor aumenta mi sensación de placer y me hace gemir… Liberarme.

Comentarios

Entradas populares